y es que esta imagen está tomada de un mural que ha estado pintando Alfonso Zapico (con ayuda de Manuela) en Cognac los últimos días, y aunque cuando le entraron las prisas me arrastró con ellos a ayudarles a terminarlo, no me dejó hacer nada que no fuese rellenar trozos con un color al que él previamente había tenido que dar el visto bueno
no me dejó dar rienda suelta a mi creatividad ni un momento, porque cada vez que me salía un poco de su férrea y estricta pauta, o bien me miraba con desdén, o bien decía su ya habitual;
- pero tíííííííííoooo!!
aún así, nos invitaron a cenar, y la gente de allí fueron bastante simpáticos, así que estuvo divertida la tarde
visiten el blog de Zapico haciendo clic aquí para ver el mural terminado, donde además cuenta alguna cosa más de la Guinguette, y donde podrán verlo posar como solo él sabe hacerlo
los ojos de arriba me hizo taparlos al minuto, pero en agradecimiento me inmortalizó en uno de los detalles del mural... lo que tengo que aguantar
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